Y YO TE LLAMABA A GRITOS

XXXVII
Y YO TE LLAMABA A GRITOS
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ABUELA GENEROSA

…Y Yo te llamaba a gritos
sabiendo que no vendrías ,
te llamé abuela querida
pero se habían pasado los días .
Y tu ya no estabas abuela ,
- ni tu casa ya era tu casa –
y la calella es una herida
que me quema y que me abrasa .
He llegado hasta tu calle
y es igual que un coladero,
ya no se escucha ni el río
y entrar en ti me da miedo .
Hasta el nombre no es el mismo ,
para mi es algo desconocido,
siempre te conocí el “COLRIU”
y ahora te lo han cambiado .
Y es que ya no queda nadie
y la calle es un barbecho ,
los árboles os han vencido ,
crece a su antojo el felecho .
Abuela, si supieras como me acuerdo
del pequeño corredor ,
las cosas que me contabas .
-Creo me hiciste mayor –
La calella tiene alma ,
y no me atrevo a pasar,
sabes, siempre grito para adentro
no te vaya a despertar .
Si abuela : te llamaba a gritos ,
se que tu me los oías
eran gritos inaudibles .
¡ Te decía que te quería!

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